Aunque todavía no se han recuperado los niveles de turistas asiáticos y americanos, las expectativas del sector turístico contemplan batir registros históricos de visitantes y pernoctaciones en 2023.

La recuperación ha sido impulsada por la demanda de ocio y esperamos que el buen comportamiento del segmento MICE en 2022 llegue a una recuperación completa durante este ejercicio.

Sin embargo, comparando Barcelona con otras grandes ciudades europeas, la oferta no se está transformando y adaptando a la misma velocidad en cuanto a marcas, calidad y tipologías de producto y nos preocupa que esto pueda afectar al posicionamiento comercial de la ciudad y la evolución de su rendimiento.

En cualquier caso, la ciudad sigue siendo uno de los mercados de inversión hotelera de máxima liquidez a nivel mundial, entra en la lista de deseos de todos los inversores, y el principal problema con el que nos encontramos es la escasez de producto.

2023 va a ser un buen año en inversión. Probablemente superemos los 500 millones de euros, un volumen directamente relacionado a la existencia de oportunidades reales.